Un modesto pero bello monumento a San Millán de la Cogolla nos da la bienvenida cuando llegamos al pueblo. Ubicado en la bifurcación desde donde parte la carretera que comunica, directamente, con la explanada de acceso al monasterio de Yuso, la figura del Santo recibe a cuántos se acercan a estos parajes.

En su momento fue un trabajo realizado entre todos y en la mejora del entorno que se está realizando se busca también el trabajo de artesanos locales.

De todo ello hablamos con Ismael Maestro Pablo, alcalde de San Millán y, por ello, impulsor de este remodelado espacio con el que la población, por intermediación del Santo, da la bienvenida a quienes se acercan. El objetivo es visibilizar el entorno y facilitar el disfrute del paraje como punto de bienvenida y convivencia.

Una imagen de dimensiones humanas, como corresponde a la modestia de San Millán, unas espectaculares letras sólidas y algún banco marcan la puerta de entrada al pueblo y a los monasterios que están ligados a la vida de este santo asceta y eremita que fundó un monasterio, el de Suso, que, a lo largo del tiempo se convirtió en uno de los centros culturales más importantes de la época.